Como dice el título, este lienzo cumple ¡¡¡¡¡DIEZ AÑOS!!!!!
Quién me iba a decir a mí que cuando allá por finales de 2010 comenzaba con esto, iba a llegar 2020 y aún seguiría por estos lares... Increíble. Y con pandemia incluida.
La verdad es que en estos años gracias a este blog, he conocido gente increíblemente buena, haciéndome crecer tanto en lo personal como en lo profesional, participando también en colaboraciones que han permitido que este humilde sitio, creciera de a poquitos.
Y es que han sido más de 100 publicaciones (sin contar colaboraciones), cientos de comentarios, casi 600 seguidores en FB y más de 4.000 en Twitter... Comencé teniendo en el "mejor" de los días, 8 visitas a la web y en el "mejor" post del mes, unas 20 lecturas (todas ellas de mis amigos o compañeros, claro...jaja). Pero la idea de crear este sitio no eran los números, sino el hacer ver que detrás de los médicos, esos soberbios endiosados históricos, son personas antes que galenos. Y no te voy a engañar, también lo he utilizado como paño de lágrimas mentales, tú bien sabes que a veces escribir hace que pase la tormenta.
Como digo, comenzaba el 29 de Diciembre de 2010 con el post "Mi primer paciente". En él, relataba cómo fue conocer a Lorenzo, "mi primer paciente", cuando aún estaba en 1º de Medicina. Aún recuerdo las palabras de la doctora con la que iba (subespecializada en cuidados paliativos) al mencionarle que era la primera vez que me ponía delante de un paciente: "Jamás olvidarás su nombre". Y así ha sido.
Seguí comentando mis hazañas de médico prepúber con ¡¡Uy perdón!! (un tubito que salió por donde no tenía que salir...), para marearme la primera vez que entré a quirófano en "¡¿Dónde están las sillas?!", también en la primera vez que saqué sangre con "De la vez que saqué sangre" y terminar deshaciéndome en mis prácticas de Obstetricia y Ginecología. Pues si ya tenía mi sospecha de que lo más bonito de la medicina iba a ser cuidar/ayudar/tratar a una mujer y a su futuro hijo, después de esas prácticas (y pese a que no fueron todo lo espectaculares que me hubiera gustado) mi idea quedó grabada a fuego. Ello me permitió escribir "Nacer y ver la luz" y "¿Magia en un hospital?"... Disfruta con mi primer contacto con mi especialidad soñada.
Otra de las especialidades que siempre me ha gustado es Pediatría. En esta ocasión DISFRUTÉ (sí, en mayúsculas) como un enano entre enanos esas prácticas pues, di con un equipo de profesionales espectacular, viví emociones que por supuesto nunca olvidaré y me sentí tan parte del servicio que hasta incluso me dejaron hacer procedimientos de alta complejidad (puse quimioterapia intratecal a una niñita, sí, puncionando la médula espinal). Por cierto, ahí me pintaron en un dibujito. Me aportaron tanto que me permitió componer "Como un niño con bata blanca. Parte I.", "Parte II", "Parte III" y "Epílogo"... Qué mundo tan bonito el de los niños y qué sería de nosotros sin su inocente magia. Tranquilo, no te voy a aburrir, sólo voy a recordar algunos "momentos"...como cuando opté por tratar como querría ser tratado en "Crónicas de un niño burbuja. Introducción" o aquella otra ocasión en la que... asistí a mi graduación con "Por mí y por todos mis compañeros" (joder, me he emocionado en volver a leer esta última...).
Otra de las entradas que quiero compartir con vosotros otra vez, fue una con la que lloré a lágrima viva escribiéndola. Pero mucho... Y es que, querido lector, la escribí justo justo el día que por fin, acabé la carrera y ya era "Yo. MÉDICO.". Puff... no tenía que haberla vuelto a leer.
Luego la "carrera" no terminó y medio de rebote terminé en Neumología con "¿Volvemos?", donde por fin ya no era estudiante y daba un pasito al frente, del paciente. Ellos me enseñaron entre otras muchas cosas, lo que es el verdadero amor en "Habitación 529", vi a mujeres hacerse más grandes que cualquiera con "Cuidadoras de Diablos" y aprendí que de la mano de mi paciente, siempre hay otra persona... te lo conté en "Cuidado, Curae, Sollicite".
Casi desde el primer momento de mi primera residencia tenía claro que iba a intentar cumplir mi sueño en cuanto la terminara... y es que no importa aquello que te guste, jamás te olvidarás de aquello otro que te enamora. Así que, me enfundé de "Diario de un #2MIR20. Prefacio" y te terminé diciendo que los sueños, también se hacen realidad en "Diario de un #2MIR20: ¿Epílogo?".
He pensado en dejarte, en cerrarte, en simplemente recordarte, pero es que creo que ahora es cuando de verdad tengo algo que contarte. Estoy viviendo un sueño y quiero compartirlo contigo, te lo mereces por todo lo que me has aguantado. GRACIAS.
Comments